
Para. Desconecta. Piensa en ti
A lo largo del día de hoy ¿cuántas veces has parado?
Mientras desayunabas, seguro que ya estabas revisando el correo electrónico. Lo mismo que has hecho cuando has tenido una pausa a media mañana. Si tienes suerte, habrás salido del trabajo para ir a comer. Mientras tanto, habrás aprovechado para mirar el móvil, hacer alguna llamada, ir a recoger a los niños de la escuela, preparar la comida…
Quizás te ha tocado quedarte en la oficina y apenas has podido calentar el «tupper» y hablar con algún compañero.
Sales. Ya es de noche. Queda la compra, recoger el niños que estaban en extraescolares, poner una lavadora, hacer deberes, ordenar un poco la casa, bañito, cena y acostarse. Quizás ya serán las 12 de la noche. Y piensas: «mañana será otro día”.
Y dime, ¿cuándo has tenido tiempo para ti? ¿Cuándo has podido leer dos páginas de aquella novela que empezaste hace tiempo y que tienes abandonada en la mesilla de noche? ¿Cuándo has disfrutado de tomarte un té caliente sin pensar en nada que no fuera ese instante entre tú y tu taza? ¿Cuánto tiempo hace que no vas a yoga? ¿Cuánto tiempo hace que no meditas 5 minutos? ¿Cuánto tiempo hace que no ves una película entera espachurrada en el sofá con tu pareja sin quedarte dormida?
¿Cuánto tiempo hace…? Pues AHORA mismo tienes la posibilidad de hacerlo. De detenerte. De desconectar. De dejarte ir. De poner la mente en blanco. O de hacer volar la imaginación. Ahora es momento de pensar en TI. Y sólo en TI.
Porque dime ¿hay alguien que pueda hacer todas estas cosas por ti?
¿Te sientes identificada con este texto?
Pues puede que haya llegado el momento de tomarte un descanso, de disfrutar de un poco de tiempo para ti.
¿Qué te parecería poner en práctica alguna de estas ideas que te propongo?
Desconecta el móvil o ponlo en modo avión durante un rato cada día. Si estás disponible para todo el mundo, también lo tienes que estar para ti misma. Lee durante 20 minutitos y céntrate en la lectura. No vale leer en el ordenador.
Tómate una taza de té o una infusión mientras miras por la ventana, observas el jardín o ojeas una revista.
Un baño relajante de vez en cuando nos ayuda a desconectar y nos prepara para ir a dormir. Unas velas, un poco de música relajante y un poco de incienso te ayudarán a crear la atmósfera idónea.
Dedica cada día 30 minutos a practicar una actividad deportiva ligera: ve a caminar, da un paseo en bicicleta, disfruta de una sesión de yoga… La actividad física moderada nos ayuda a aumentar nuestros niveles de serotonina, encargada de mejorar nuestro estado de ánimo.
Fija un día al mes para quedar con tus amigos. Las relaciones sociales no se deben olvidar nunca. Disfruta de una charla con las amigas, de una cena informal o de una actividad compartida. El contacto con los demás nos hace más felices.
Organiza bien las tareas de la jornada. Hazte un planning o un horario de todas las cosas que tienes que hacer durante el día y cúmplelo. Siempre tienes que dejar un rato reservado para ti.
Tomarse un tiempo cada día para relajarse y renovarse es esencial para vivir bien.-Judith Hanson Lasate
Y dime, ¿a ti te pasa? ¿Sientes que nunca tienes tiempo para ti? ¿Crees que tu vida gira entorno a los demás y vives para ellos? Cuéntame tu experiencia en los comentarios o mándame un mail a hola@mesquelletuga.com
Hablemos de ello. Compartir, puede ser una gran ayuda. Te lo aseguro.
SALUD INTESTINAL: LAS CLAVES PARA CUIDAR DE TU MICROBIOTA
[…] de nuestra salud intestinal. Encuentra momentos para desconectar y prestarte un poco de atención. Este artículo puede […]